El día 28, Twitter anunció que renovaba sus botones y logotipos para que armonicen con el nuevo aspecto del servicio y su página principal. Ciertamente, no parece un tema lo suficientemente importante como para merecer una entrada en su blog corporativo:
We've refreshed our logos, buttons, and widgets to bring the improved look and experience of the new Twitter to your website or blog.
Si quieren descubrir la verdadera razón de la entrada, vayan unas líneas más abajo, donde podrán leer:
These resources are free for you to use, as long as you follow the updated Guidelines for Use of the Twitter Trademarks.
Y ahí está la madre del cordero pajarito. En las condiciones de uso respecto a su nombre e imagen de marca, podemos observar un notable incremento en las cosas que no se pueden hacer. ¿Recuerdan la neolengua? Aquella demencia que aparecía en 1984. Bueno, pues Twitter ha diseñado también su propio idioma. Revisemos las indicaciones; en negrita, las palabras de Twitter. Sin negrita, mis comentarios.
Cosas que no se pueden hacer con Twitter
-
Manipular el logotipo salvo en caso de necesidad, debido a restricciones de color. Esta le va a encantar a los diseñadores.
-
Usar el dibujo del pajarito para «transportar» tu propio logotipo o tus mensajes. Es decir, como hacen miles de blogs que, de paso, enlazan a Twitter.
-
Usar versiones no actualizadas de los logotipos. Si la versión más reciente del diseño te hace vomitar, mejor compra una bolsa; pero no cambies el logotipo, forastero.
-
Usar cualquier otro tipo de arte perteneciente a Twitter.com sin permiso explícito. ¿Dónde estarían ahora si no hubiesen permitido eso hasta la saciedad?
-
Crear tus propios botones a partir de sus logotipos. Otra vez un gran WTF de diseño.
-
Hacer afirmaciones imprecisas sobre el servicio. Twitter tiene pajaritos. ¿Es lo suficientemente impreciso?
-
Titular un libro sobre Twitter que engañe a la gente, pensando que lo han escrito ellos. No vaya a ser que no lean el nombre del autor.
-
Usar el logotipo en la portada o en el título. Mejor ponemos un aguacate.
-
Hacer pantallazos de perfiles o tweets ajenos sin permiso. Y el mundo se fue a la cárcel.
-
Utilizar el nombre de Twitter en tu aplicación. Y no miramos a nadie.
-
Registrar un nombre que incluya el término «twitter» (o alteraciones de Twitter). Por ejemplo, Twittontería o Twittomarelpelo.
-
Usar «Tweet» en tu aplicación si vale para otras plataformas. Y no miramos a nadie.
Cosas que se deben hacer con Twitter
-
Referirse a Twitter cuando se hable de ellos. Utilizar la expresión «Tweets» cuando se hable de los mensajes del servicio. ¡Ciudadano español! Ni se te ocurra castellanizar nada. ¡Periodista español! Más de lo mismo.
-
Asegurarse de que los Tweets puedan ser identificados como Tweets. WTF again?
-
A la hora de hacer una captura de pantalla, utilice la página principal de Twitter o la página de su perfil. Sin embargo, esto entra en contradicción con el «no debes hacer» número 9, ya que en la página principal de Twitter aparecen muchos tweets ajenos, por lo que habría que pedir permiso a todas y cada una de las personas que aparecen en el pantallazo.
Las instrucciones de Twitter hacia los medios tradicionales son, si cabe, aún más risibles. Seguir todas esas normas al pie de la letra implica convertirse en un anunciante de Twitter y causar la gran carcajada a la hora de hablar sobre este servicio. ¿Quién sabe? A lo mejor Twitter tiene razón. Quizá estas normas son de lo más lógico y ninguna de las actividades que ahora prohíbe con un cinismo descarado ayudó a consolidar su imagen de marca y a convertirlo en el servicio de uso masivo que es ahora. Bah, estos usuarios, periodistas, blogueros, diseñadores y programadores de aplicaciones creen que por catapultar una marca al estrellato tienen cierta libertad para hablar de ella. Faltaría más.
Actualización: Techcrunch tiene algunas declaraciones de Twitter, clarificando que lo riguroso de las condiciones está más orientado a iniciativas comerciales que a bloggers o noticias en general:
For news, whether online or print, it's okay to use screenshots of Tweets. The permission applies more to merchandise, billboards, etc. Users' rights are key.
Lo que nos lleva a preguntar: ¿Para cuándo unas condiciones de uso que estén «en cristiano»? Si el cumplimiento de las normas no se aplica a gran parte de la red, ¿por qué no se clarifican?