NIVEN, Larry. Mundo Anillo. Traducido por Mireia Bofill. Madrid: La Factoría de Ideas, 2007. 411p. ISBN 978-84-96689-25-1
Aventureros con buena estrella
En el año 2850, cuatro exploradores (dos humanos y dos alienígenas) son elegidos para explorar un misterioso "mundo anillo", una enorme estructura artificial en forma anular que rodea una estrella. La historia ocurre en un universo tecnológicamente avanzado, donde la teleportación instantánea y los cascos de naves espaciales indestructibles son una realidad.
Tardé en decidirme para comentar Mundo Anillo. Puede que el mejor modo de comenzar sea un consejo: disfruta del viaje. Me pasé más de la mitad de la novela intrigado e interesado en desentrañar secretos anillícolas. Ello hizo que me perdiera parte del encanto del viaje en sí mismo, y del fabuloso grupo de aventuras que protagoniza la obra.
La guerra entre civilizaciones
La novela transcurre en un futuro lejano, años después del conflicto entre humanos y Kzinti: una temible raza de guerreros con aspecto felino que estuvieron a punto de acabar con la especie, hasta que un adelanto tecnológico cayó en manos de una pequeña colonia llamada "Lo Conseguimos" (me encanta el nombre), y permitió a la humanidad poner fin a la contienda.
Ciencia y maravillas
Las explicaciones y detalles suelen darse en forma de goteo. Sin embargo, los grandes aficionados al género ya conocerán casi todos los términos empleados en la novela. Leerás nombres como "Vástagos de las Estrellas", "Esfera de Dyson" o "Roseta de Klemperer" alguna página antes de la explicación correspondiente.
Que la suerte te acompañe
Uno de los mejores puntos de la novela es la suerte. Como cualquier otra habilidad o fortaleza, la novela reflexiona sobre las posibilidades para crear mediante control de población a un conjunto de seres extraordinariamente afortunados en la vida, y cómo esa misma suerte podría hacerles eternos esclavos de la buena estrella.
Mundo Anillo es una obra que se echa de menos una vez se termina de leer. Muy recomendable para quienes gusten de la creatividad en la ciencia-ficción… Y tengan un gato en casa.